Toda persona consciente
debe tener muy presente
que en este día especial
una broma es esencial,
y ya nadie va a intentar
que se trate de evitar.
Para el abierto de mente
y que además es paciente,
un consejo muy cordial,
que en este asunto es crucial,
la guasa se ha de aguantar
sin tratarla de esquivar.
Resulta muy atrayente
renunciar a ser prudente
para hacer algo jovial,
conseguir buen material
y una chanza preparar
que a nadie pueda enfadar.
Hay que ser muy ocurrente
para engañar a la gente
de una manera informal
sin dejar de ser social,
por ello quiero alertar:
¡de la chufla no abusar!
IMAGEN DE LA RED
No
podemos olvidar que este día recordamos a los niños menores de dos años que
mandó matar Herodes creyendo que con
este horrible acto acabaría con la vida
de ese “supuesto rey” acabado de nacer y que podría poner en peligro su propio
trono. ¡Que equivocado estaba y que poco entendió las Sagradas Escrituras! Su
ambición le cegó y le convirtió en un cruel asesino.
Soy
muy tradicional y no me gustaría nada que este simpático día, a la vez que dramático recordatorio, pasara
al olvido.



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